We are writing to express our disappointment that your administration has yet to take steps towards normalizing relations with Cuba, despite the fact that most of the previous administration’s policy changes can be reversed with a single executive order. On June 23, you missed an opportunity at the United Nations to announce a new policy. Instead, the U.S. and Israel stood alone, against 184 countries, in clinging to this inhumane, outdated, policy that is rejected by the rest of the world. The UN vote damaged U.S. leadership and credibility at a time when your administration has sought to reaffirm the US role in the global community. 

As you are aware, during President Trump’s time in office, he reversed the gains made by the Obama-Biden administration in normalizing relations with Cuba, adding over 200 restrictive measures. Rather than suspending any of these cruel restrictions on a humanitarian basis due to the pandemic, Trump imposed dozens of additional restrictions or tightened existing ones, severely affecting the well-being of the Cuban people and the ability of their loved ones to help them. 

We are disappointed that you are going back on your campaign pledge to reverse many of the Trump administration’s policies towards Cuba. Keeping limits on remittances makes life harder for Cubans and is a violation of the civil liberties of Cuban-Americans, who should have the right to send money to their families. These harmful Trump policies continue to harm millions of innocent Cubans and reversing them should have been done your first day in office. 

Now, we are deeply concerned that the protests in Cuba will be used to justify inaction on the embargo, or worse, that they will be used to justify more sanctions or even intervention.

In 2016, the Obama administration chose diplomacy over confrontation. We call on you to follow President Obama’s lead by immediately taking measures -- consistent with your pre-election promises and the results of your review of the impact of sanctions on COVID-19 response -- to provide relief for the Cuban people and return to the path of normalization in our relationship with Cuba.

Sincerely,

Presidente Biden,

Estamos escribiendo para expresar nuestra preocupación en vista de que su administración no ha tomado las acciones pertinentes para normalizar las relaciones con Cuba, a pesar de que la mayoría de los cambios en las políticas de la administración anterior pudieran ser reversadas con tan solo una orden executiva. El 23 de junio, la Asamblea General de las Naciones Unidas votó para condenar el embargo a Cuba por parte de los Estados Unidos así como ha hecho regularmente desde 1992. Esta vez el voto fue 184 a 2. Le pedimos que escuche al mundo y normalice las relaciones con Cuba.

Como usted sabe, durante el mandato del presidente Trump, este último reversó las mejoras hechas por la administración de Obama/Biden para normalizar las relaciones con Cuba y añadió más de 200 medidas restrictivas. En vez de suspender algunas de estas crueles restricciones  por cuestiones humanitarias en base a la pandemia, Trump impuso docenas de restricciones adicionales o reforzó las existentes lo cual ha afectado severamente el bienestar del pueblo cubano y la habilidad de sus seres queridos para ayudarlos.

Apreciamos mucho la promesa que hizo como candidato para reversar muchas de las políticas de la administración de Trump hacia Cuba, y nos animó mucho el anuncio de su administración de realizar un análisis de “sanciones económicas para evaluar si están dificultando excesivamente respuestas a la pandemia de COVID-19.” Pero hasta ahora, su administración no ha tomado medidas para reversar estas políticas de Trump, que continúan dañando a millones de cubanos.

El voto de la ONU que pide terminar el embargo comercial económico y financiero contra Cuba corre el riesgo de dañar el liderazgo y la credibilidad de los EE. UU. en un momento en el cual su administración ha buscado reafirmar el papel de los EE. UU. en la comunidad global. La resolución incluye un lenguaje contra la aplicación extraterritorial del embargo, el cual ha dificultado la habilidad de esfuerzos humanitarios para proveer asistencia medical a Cuba durante la pandemia. También denuncia el régimen de las sanciones extraterritoriales del embargo que impide comercio con terceros países por imponer multas de miles de millones de dólares a bancos -incluyendo bancos europeos- por ayudar a clientes con comercio no militar con Cuba.

 Le hacemos un llamado a ser consistente con sus promesas antes de la elección y los resueltos de su análisis del impacto de sanciones en la respuesta a COVID-19 – para proveer ayuda al pueblo cubano y volver al camino de normalización en las relaciones con Cuba.

Saludos cordiales,

Cc: Linda Thomas-Greenfield, el embajador EE. UU. a la ONU.

Translated by: Sean Murley